¿Por qué debemos de establecer límites?
Sabias que los limites le indican a la persona “¿hasta donde puede llegar el otro contigo?” y que cuando no los establecemos, estamos dando rienda suelta a que hagan con nosotros lo que los demás deseen, por lo tanto, los límites permiten tener relaciones interpersonales sanas y, respeto por uno mismo.
Dichos límites se deben tener en cuenta en las diferentes relaciones que tengamos ya sea a nivel familiar, social, laboral, de pareja y hasta con uno mismo.
Según Ana María Romero Ibagón en su artículo Como poner límites y mejorar la salud mental,” los límites pueden ser físicos, emocionales, cognitivos o de otro tipo, y sirven para establecer una serie de normas o reglas que rigen la interacción entre las personas o entre individuos y su entorno.”
Nosotros nos centraremos en los límites emocionales los cuales se refieren a las barreras que protegen la estabilidad emocional de una persona.
En mi práctica profesional considero que los siguientes aspectos son relevantes para establecer límites emocionales.
Recomendaciones:
- Aprender a decir “NO”. Esto te libera de hacer o permitir algo con lo que no estés de acuerdo.
- “Escucha, analiza y decide”, no tomes decisiones a la ligera, piensa bien que te conviene, hasta donde puedes llegar y que te hará sentir mejor.
- Identifica si hay manipulación de la otra persona dejando en claro lo que sientes y piensas. Recuerda eres una persona, no una marioneta, tu decides sobre ti mismo.
- Cuando comuniques lo que deseas, usa un lenguaje claro, asertivo, pertinente, evita los rodeos.
- No sientas culpa si la otra persona expresa tristeza o molestia por tu decisión.
- No confundas tu seguridad y decisión con actuar de forma agresiva para establecer tus límites.
Cuando logramos establecer límites emocionales fortalecemos nuestra autoestima, autopercepción, las relaciones interpersonales, nos sentimos mas seguros de nosotros mismos, logramos ser mas empáticos evitando transgredir los límites del otro, aprendemos a asumir la responsabilidad de las decisiones que tomamos.
Martha Rodríguez
Psicóloga UltraDover
Especialista en Neuropsicología